4. Heridas en la Cabeza (Rostro)
En la cabeza encontramos la razón, y en el rostro
encontramos la boca, las mejillas, los ojos, la nariz y los oídos; que son
partes muy significativas en el contexto bíblico; analicemos dichas partes y
así poder encontrar las enfermedades. Siempre recordando que todo tiene arreglo
en Cristo, pues por sus heridas hemos
sido sanados.
a) Sanidad En La Mente
La enfermedad más común de la cabeza es la locura,
en el mundo espiritual la locura tiene un sentido más profundo que en el
físico, estudiémoslo.
LA MURMURACION CONTRA AUTORIDADES
El que murmura contra una
autoridad evidencia locura, un ejemplo claro lo encontramos con María y Aarón,
quienes eran hermanos mayores de Moisés, creyeron ver en su hermano menor un
error en la elección de su mujer, dando rienda suelta a la murmuración,
olvidando que era su autoridad y perdieron el temor, y así la cordura, Núm 12:10-11 10 Y la nube se apartó del
tabernáculo, y he aquí que María estaba leprosa como la nieve; y miró Aarón a
María, y he aquí que estaba leprosa. 11 Y dijo Aarón a Moisés: ¡Ah! señor mío, no pongas ahora
sobre nosotros este pecado; porque locamente hemos actuado, y hemos pecado.
En el matrimonio el Señor estableció jerarquías, así
el varón debe sujetarse a su autoridad Jesucristo, la mujer al varón, y los
hijos a los padres. Cualquier rebelión,
murmuración contra la autoridad que Dios ha establecido es estar enfermo de la
cabeza.
Otro ángulo que debemos
analizar sobre este tema está en la murmuración contra las autoridades de la
iglesia, sé que es necesario que hayan problemas en las relaciones
interpersonales entre algunas ovejas, se dio en el pasado y se dará pues es una
forma en que el Espíritu prueba a las ovejas para pasarlos a mejores niveles, 1 Cor. 11:18-19 18 Pues en primer
lugar, cuando os reunís como iglesia, oigo que hay entre vosotros divisiones; y
en parte lo creo. 19 Porque es preciso que entre vosotros haya
disensiones, para que se hagan manifiestos entre vosotros los que son
aprobados. Es fácil decirlo pero
cuando le toca a un creyente pasar por la desilusión de actitudes de hermanos
carnales, es difícil aunque no imposible sujetar la carne, y sobre todo la
lengua, hay que tener mucho cuidado de
no murmurar de estos hermanos, sobre todo cuando son líderes delante de sus
hijos, pues después que termina la prueba y se reconcilian, el daño de la
actitud queda fijo en los hijos que vieron la injusticia dada contra los
padres.
LA USURPACION DE FUNCIONES
1 Sam 13:12-13 12 Me dije:
Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal, y yo no he implorado el
favor de Jehová. Me esforcé, pues, y ofrecí holocausto. 13 Entonces Samuel dijo a Saúl: Locamente has
hecho; no guardaste el mandamiento de Jehová tu Dios que él te había ordenado;
pues ahora Jehová hubiera confirmado tu reino sobre Israel para siempre.
Otro desorden de la cabeza es usurpar funciones, es
decir que cada integrante de la familia tiene su razón de ser, los dones y
funciones; pero cuando se usurpa una función se crea un desorden que Dios no
avala, así por ejemplo los hijos jamás deben gobernar el hogar bajo pretexto de
ser más preparados académicamente sobre los padres, o que un hijo se dé a la
tarea de corregir y disciplinar a sus hermanos, cuando es una función exclusiva
de los padres.
Cuando una esposa usurpa el lugar del esposo o
viceversa se da un desorden de funciones que traerán tarde o temprano
conflictos, pues es apartarse de los principios de la Palabra; un grupo de
psicólogos determinó que las madres dominantes que ejercen matriarcado en el
hogar regularmente influencian sobre sus hijos varones el modelo de autoridad,
creando conductas afeminadas.
ESCUCHAR LA VOZ DEL DIABLO
Cuando nos convertimos al
evangelio, abandonamos la cobertura del diablo, para tomar la cobertura de
Cristo quien se convierte en nuestra cabeza.
Cabeza de quien debemos recibir órdenes, cuando actuamos, decimos cosas
que no fluyen de nuestra Cabeza, enloquecemos, y tenemos ejemplos en la Biblia
de hombres usados por Dios escuchando esa voz extraña, tales como Eva, Pedro o
David: 1Cr 21:7-8 7
Asimismo esto desagradó a Dios, e hirió a Israel. 8 Entonces dijo
David a Dios: He pecado gravemente al hacer esto; te ruego que quites la
iniquidad de tu siervo, porque he hecho muy locamente.
Es lo que quiso el maligno hacer contra Jesús en el
desierto, incitarlo a hacer cosas lícitas y hasta con respaldo de la Biblia,
pero emitidas por las tinieblas. Por
ejemplo, cuando le ordenó que convirtiera las piedras en panes. Aprendamos a discernir de qué cabeza fluye lo
que recibimos. No nos veamos después
haciendo obras lícitas incitadas por las tinieblas que desde luego traerán
problemas serios al hogar.
En el caso de Ananías y Safira se pusieron de
acuerdo para sustraer parte de la heredad vendida, eso era lícito hacer, pero falsamente
declararon que el aporte dado a la obra de Dios era la totalidad. Esta mentira provino de corazones llenos de
la maldad del diablo; la consecuencia fue terrible. No debemos mentirle al Espíritu Santo.
PONER LA CONFIANZA EN LO APARENTEMENTE FUERTE Y NO EN DIOS
2Cr 16:7-9 7 En aquel tiempo vino el vidente
Hanani a Asa rey de Judá, y le dijo: Por cuanto te has apoyado en el rey de
Siria, y no te apoyaste en Jehová tu Dios, por eso el ejército del rey de Siria
ha escapado de tus manos. 8 Los etíopes y los libios, ¿no eran un
ejército numerosísimo, con carros y mucha gente de a caballo? Con todo, porque
te apoyaste en Jehová, él los entregó en tus manos. 9 Porque los
ojos de Jehová contemplan toda la tierra, para mostrar su poder a favor de los
que tienen corazón perfecto para con él. Locamente has hecho en esto; porque de
aquí en adelante habrá más guerra contra ti.
A Jehová le irrita que pongamos la confianza y que
pidamos ayuda a quien quiera que sea sin su aval o dirección. Que confiemos en personas encumbradas, no
digamos la confianza en juegos de azar, amuletos, brujerías, ídolos, etc. Recordemos que Abraham se negó a recibir
ayuda alguna del rey de Sodoma, pues dicho rey más adelante podría atribuirse la
gloria de la prosperidad de Abraham.
ABANDONAR LA CASA DEL PADRE
Cuando una persona ha
conocido la gloria del evangelio, la gracia salvadora de Dios y su poder, sólo
que se vuelva loca puede apartarse y abandonar el evangelio. Sin embargo esto sucede, y la Biblia nos
afirma que cuando es pasa es porque dicha persona se desequilibra mentalmente,
es decir, se vuelve loca. Esto es lo que
narra el libro de Lucas en el capítulo quince, cuando el hijo prodigo, luego de
haber conocido la bendición de la casa paterna se fue a la tierra lejana, Luc 15:17-18 17
Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen
abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! 18 Me levantaré e iré a mi padre, y le diré:
Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.
Es por esto que el Señor
permitió que le colocaran en su cabeza la corona de espinas, para sanar nuestra
mente y que jamás decidamos abandonar el evangelio, y el privilegio de servirle
con nuestra familia, Heb 10:38-39 38 Mas el justo vivirá por fe; Y si
retrocediere, no agradará a mi alma. 39 Pero nosotros no
somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para
preservación del alma. Debemos pedir sanidad cada vez que tengamos
batallas, pruebas, tribulaciones, problemas con hermanos, sobre todo cuando se
trata de algún líder, etc. Para que por nada del mundo nos pase por la mente la
locura de desertar.
Hay hermanos que
constantemente abandonan el privilegio, la vida congregacional, y otro tiempo
regresan, ¿Qué explicación le darán a sus familias de tales actitudes y
decisiones?
Como justificar la deserción delante de los hijos, qué
explicaciones de dan….
LOS CELOS
Son sentimientos de peligro de perder al ser amado,
de ser sustituidos por otra persona, trabajo, o actividad. Se deriva de la
inseguridad propia, de una baja estima, o egoísmo; éstos cuando son infundados.
Los celos fundamentados son aquellos que tienen
razones obvias y comprobables de ser; sin embargo de todo esto quiere librarnos
Jehová. Es una obra de la carne que debemos subyugar con el poder de su Santo
Espíritu.
Los celosos imaginan y elucubran escenas novelescas
de traición, y desprecio. Después de imaginarlas, lo dan por hecho, y causan
serios problemas en el matrimonio no solo por las discusiones que se arman sino
porque dañan la confianza que debe existir en la pareja, ya que el conyugue
prefiere guardarse en su corazón alguna actividad que desarrolló por temor a
desatar una nueva y agotadora discusión.
El problema del
celoso es que puede estar creando una atmosfera espiritual por sus temores,
pensamientos y confesiones carnales, para que el reino de las tinieblas vea en
esto una puerta abierta, Pro 6:14 14 El malvado
trama el mal en su mente, y siempre anda provocando disensiones. 15
Por eso le sobrevendrá la ruina; ¡de repente será destruido, y no podrá
evitarlo!
Job 3:25 Lo que más temía, me sobrevino; lo que más me asustaba, me
sucedió. El temor es una
puerta a que sucedan las cosas que tememos, pues el temor es lo contrario a la
fe, y recuerde que sin fe es imposible agradar a Dios.
Los celos se crean o se reafirman cuando ha habido
de por medio una infidelidad, entendiendo que
si la pareja sigue junta a pesar de tan doloroso acto, es porque el amor está
prevaleciendo sobre toda obra de las tinieblas. En semejante caso es necesario
renunciar a los recuerdos que lastiman, y tomar la decisión de nunca utilizar
el pasado como un arma para reprochar, herir, o utilizarlos para una discusión
en el futuro. Que el Señor llene tanto ese hogar de su presencia, que los actos
del pasado sean eclipsados por los nuevos frutos del Espíritu en la pareja.
Si una de las partes falló, y de eso se derivan los
celos de su pareja, debe ser radical en la prueba de su arrepentimiento y del
abandono del pecado. Debe ministrarle seguridad a su pareja de que es a ella a
quien se le ama, de quien se está enamorado, y de quien se piensa.
PLANES
Pro 16:3 Encomienda a Jehová tus obras y tus
pensamientos serán afirmados. Todos los matrimonios debemos elaborar planes para
el futuro, hacerlos es parte de la fe, del creer que Dios es poderoso para
bendecirnos.
Hay dos partes
patológicas en la planificación, la primera el matrimonio que adolece de
planes, y segunda el que los elabora sin consultar al Espíritu Santo.
Carecer de
planes es perder el deseo de vida, es vivir a lo que caiga o salga; y esto
surge cuando la relación se ha vuelto rutinaria, y se llega a un estado de
conformismo. Cada día pasa con el mismo contenido, pues no hay algo nuevo que
sorprenda a la pareja. Bendito sea su Nombre que de esa vida sosa podemos
salir, por sus benditas heridas en la cabeza.
Dios quiere que planifiquemos, Lc. 14:28-32 32
¿Quién de vosotros, queriendo edificar
una torre, no se sienta primero y
calcula los gastos, a ver si tiene lo
que necesita para acabarla? 29 No sea que, después que haya puesto el cimiento, no pueda acabarla y todos los que lo vean
comiencen a hacer burla de él, 30 diciendo: "Este hombre
comenzó a edificar y no pudo acabar". 31 ¿O qué rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede
hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil? 32 Y si no puede, cuando el otro está todavía lejos le envía
una embajada y le pide condiciones de paz. Que tengamos visión de
prosperidad, con mente de vencedores, que hagamos cálculos, ahorros, con una
dependencia a su voluntad y dirección del Espíritu Santo en nuestros
matrimonios.
Haga una lista
de lo que desea alcanzar, en lo espiritual y material. Trabajen juntos, como matrimonio involucrando
a los hijos hacia esas metas, quizá no todas logremos alcanzar, pero seguro es
que el tiempo pasará y al final veremos mucho de lo idealizado alcanzado, o
sencillamente ver pasar el tiempo sin lograr nada.
Nuestros planes
deben ser sin egoísmos, arrogancias, ni rivalidades, ni competencias, ni nada
semejante a estas actitudes, teniendo en cuenta que nuestra vida entera le
pertenece solo a Él.
b) Sanidad En La Boca
Pro 12:18 Hay hombres cuyas palabras son como golpes de
espada, pero la lengua de los sabios es medicina.
De acuerdo a como fuimos formados en
nuestro hogar, así reproduciremos esa formación a nuestros hijos, si nuestra
formación se estableció en base a gritos, maltratos, golpes verbales, y
vejaciones; lo más seguro es que esa es la formación que se reproduce en la casa
propia; a no ser que intervenga la mano Poderosa de Dios, quien puede darnos
por su Espíritu, y Palabra, una nueva forma de vida en Cristo.
Nuestra boca puede sanar, de manera que
los insultos y humillaciones verbales pueden desaparecer, cuando sujetamos
nuestra vida al Espíritu y su Palabra.
Dios quiere sanar la boca que insulta y humilla por
una boca de la cual salgan palabras dulces, edificantes, y que de gracia quienes
nos escuchan. Sustituyamos lo tosco por
lo dulce, las maldiciones por las bendiciones.
Cuidado con lo que confesamos…
Las confesiones pesimistas, y negativas son
enfermedades de la boca, ya que fuimos llamados a confesar lo que dice la
Palabra de Dios y para eso debemos conocerla. En la Biblia están todos los
derechos que Jesucristo a través de su sacrificio compró para nosotros.
Nunca debemos confesar derrota, inutilidad,
imposibilidad, desgracia, pues es ofender al Dios de la Biblia, lo que debemos
confesar es lo que marca la Escritura, que todo lo podemos, que no hay nada
imposible, que somos más que vencedores, siempre amados por Dios, y salvos
eternamente por su Gracia.
Ef. 5:4 Tampoco digáis palabras
deshonestas, ni necedades, ni groserías que no convienen, sino antes bien acciones de gracias.
Para mantener el respeto en el hogar entre conyugues e hijos, debe
evitarse corregir o reaccionar con palabras inadecuadas. Los insultos son
puertas abiertas a la rebelión, y a crear un ambiente para que el reino de las
tinieblas proyecte sus obras de destrucción.
Col 3:8 Pero ahora dejad también
vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras
deshonestas de vuestra boca.
La Biblia habilita a los padres a corregir y disciplinar a los hijos, aún
con una vara en caso de necedad, pero no nos habilita a humillarlos, y abusar
de nuestra autoridad, lanzando sobre ellos
palabras de maldición, o golpes exagerados. La corrección lo que quiere
lograr es la transformación de la conducta mala de los hijos, no venganza,
desquite, o destrucción de nuestros amados hijos.
Antes bien, utilicemos la boca para bendecir, sanar, pedir perdón y
perdonar, corregir en amor, y alabar las cualidades de los que amamos.
c) Sanidad En Las Mejillas
A través de las palabras de Jesús entendemos que las mejillas
representan la humildad para tolerar y darle otra oportunidad a quien nos
ofende. Mat 5:39 Pero yo os digo: No resistáis al que es
malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla
derecha, vuélvele también la otra. El volverle la
otra mejilla al que hiere, no es otra cosa que darle otra oportunidad a quien
nos ofende, como si nunca nos hubiese lastimado.
Esta
es la actitud que el apóstol Pablo pidió a Filemón sobre Onésimo, quien ya una
vez le había ofendido, pero que a través de la corrección recibida, el
engendramiento en la prisión, y sobre todo el haber encontrado un discipulador
de la talla de Pablo, le otorgaban el beneficio de una nueva oportunidad, Fil. 1:10-15 10
Te ruego por mi hijo Onésimo, a quien
engendré en mis prisiones, 11 el cual en otro tiempo te fue inútil, pero ahora a ti y a mí nos es útil. 12 Te lo envío de nuevo. Tú,
pues, recíbelo como a mí mismo. 13
Yo quisiera retenerlo conmigo, para
que en lugar tuyo me sirviera en mis prisiones por causa del evangelio. 14 Pero nada quise hacer sin
tu consentimiento, para que tu favor no
fuera forzado, sino voluntario. 15 Quizá se apartó de ti por
algún tiempo para que lo recibas para siempre.
Muchas veces hemos oído el comentario de hermanos que expresan: “Yo no
doy segundas oportunidades, con una que me hagan y no vuelvo a confiar”, etc.
El guardar rencor no es sano, es una actitud patológica, y Cristo Jesús quiere
sanar nuestra vida para que con cautela volvamos a dar oportunidad a la gente
que nos defraudó, de otra manera estamos negando el poder de la restauración
que el Espíritu Santo puede hacer en una persona, lo que Pablo le pide a
Filemón es que ponga la otra mejilla.
Lo que el padre hizo con su hijo pródigo fue darle una nueva oportunidad
poniendo la otra mejilla, caso contrario con el hermano del pródigo que no
quiso poner la otra mejilla, no estaba dispuesto a confiar en su hermano, qué
tipo de corazón puede tener si de alguna manera el despreciaba la herencia al
nunca haber tomado nada.
Al final todos en algún momento del diario convivir hemos necesitado de
una nueva oportunidad, y de recibir un perdón incondicional, ya como esposos,
padres, hijos, hermanos, etc.
d)
Sanidad En Los Ojos
OJO MALIGNO
El ojo maligno es aquel que siempre busca un
defecto, error, imposibilidad, dificultad, fracaso en las cosas; nunca ve lo
positivo, lo sobresaliente, esfuerzo, posibilidad, progreso; de las personas,
de los acontecimientos, actos, actitudes, lugares, regalos, comidas, etc. En
conclusión siempre hay algo malo.
Lo bueno se pudo haber hecho mejor, y por ende no
disfruta nada de lo que acontece pensando que pudo haber algo mejor. Esta actitud desanima, frustra y desalienta.
Jesús a través de
su sacrificio quiere sanar nuestro ojo, transformándolo en benigno, que es un
fruto del Espíritu en nosotros, para que siempre podamos reconocer en todo lo
que acontece, sucede, a nuestra vida algo bueno recordando que, Rom. 8:28 Los que aman
a Dios, todas las cosas los ayudan a
bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
OJO LUJURIOSO
Job 31:1 Yo había convenido con mis
ojos no mirar con lujuria a ninguna mujer.
El justo Job, hacía pactos y convenios con sus
ojos en su generación para no dar lugar a la lujuria, concupiscencia, y
adulterio. Hoy a través de las modas, y medios de comunicación la sensualidad
es punta de lanza en todos los ámbitos, y por tanto, debemos seguir el ejemplo
de Job, y pactar con nuestros ojos para alejarnos del pecado sexual.
Ya el patriarca José nos dio muestras de la
victoria sobre el pecado sexual, al rehusarse por temor a Dios y a las
consecuencias que conlleva estos actos.
Si ha sido contaminado con morbosidad. Y los ojos los tiene enfermos de
adulterio y concupiscencia, recuerde: POR SUS HERIDAS SOMOS SANADOS.
OJOS ALTIVOS
Prov. 6:16-19 16
"Seis cosas aborrece Jehová, y aun siete le son abominables: 17 los ojos altivos, la lengua
mentirosa, las manos que derraman sangre inocente, 18 el corazón que maquina pensamientos inicuos, los pies
que corren presurosos al mal, 19 el testigo falso, que dice
mentiras, y el que siembra discordia
entre hermanos.
La lista de las cosas aborrecibles a nuestro Dios la encabeza los ojos
altivos, es bueno saber lo que es desagradable para no hacerlo. Cuando Dios nos
ha permitido estar en eminencia sobre otros, no nos da permiso para humillarlos
o verlos con menosprecio. Esa es una enfermedad que el poder del sacrificio de
Jesús en la cruz puede sanar.
Mucho más cuando ni siquiera hay algo de qué jactarse, y el orgullo se
basa en quimeras.
Por el contrario la Biblia nos dice: Fil. 2:3…estimando
cada uno a los demás como superiores a él mismo.
Cuando
logramos considerar a nuestra pareja e hijos como superiores, será entonces un
gusto servirles, quedar bien con ellos, tolerarlos, pues ¿Quién no quiere
agrados a su superior?
CEGUERA
INTROSPECTIVA
Isa 5:21 ¡Ay de los que son sabios ante sus propios
ojos, de los que son prudentes delante de sí mismos!
Es una seria enfermedad no poder ver hacia el interior con el propósito
de encontrar los defectos que Dios ve en nosotros, y aún los que nos rodean;
ésta ceguera no permite el arrepentimiento para lograr la conversión de los
hechos que no solo nos destruyen, sino que nos separan de la Gloria de Dios.
Siempre hay que justificar las malas acciones, pues según ellos son
provocados para obrar así, sus malos actos son justificados pues son reacciones
contra ellos.
Esta enfermedad fue muy aguda en el grupo religioso de los fariseos muy
acostumbrados a querer corregir el pecado ajeno, sin tener la capacidad de
revisar la propia, que era hasta peor delante de Dios que los hombres que ellos
juzgaban.
Mat 7:3 ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de
tu hermano y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 4
¿O cómo dirás a tu hermano: “Déjame sacar la paja de tu ojo", cuando tienes la viga en el tuyo? 5 ¡Hipócrita!
Saca primero la viga de tu propio ojo,
y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano.
Que el Señor permita un ojo tan sano que tenga la capacidad de revisar
primero nuestro interior, para que con toda misericordia y amor podamos
corregir el de los demás.
OJOS IDOLÁTRAS
Ez. 20:24 porque no pusieron por obra mis decretos,
sino que desecharon mis estatutos,
profanaron mis sábados y tras los ídolos de sus padres se les fueron los
ojos.
Las prácticas idolátricas que por cierto van de la mano con las
ocultistas y supersticiones, son abominación a Jehová, ningún hogar que abra
sus puertas a la veneración de objetos, amuletos, talismanes; o que ponga su
confianza en hechiceros, horóscopos, y prácticas ocultistas, o el que pone
intercesores delante de Dios (vírgenes, o santos) puede esperar bendiciones de
Dios.
Aún el comer
comidas como sacrificadas a ídolos son prácticas réprobas por el Espíritu Santo
que el apóstol de la gracia llamado Pablo tuvo que corregir de los corintios, 1Cor. 8:7 Pero no en todos hay este conocimiento, pues
algunos, habituados hasta aquí a la idolatría,
comen como si el alimento fuera sacrificado a ídolos, y su conciencia,
que es débil, se contamina.
Muchos matrimonios en su inicio fueron dedicados a ídolos, por lo cual
deben renunciar a los derechos que le cedieron no tanto al objeto venerado, o
ídolo; sino al trasfondo espiritual que conlleva un ídolo, ya que es demoniaco, es importante renovar el pacto matrimonial, y
los votos de amor y fidelidad en la presencia del Dios Único y Verdadero,
recibiendo la bendición ministerial, 1Cor. 10:20 Antes digo que aquello que los gentiles
sacrifican, a los demonios lo sacrifican
y no a Dios; y no quiero que vosotros os
hagáis partícipes con los demonios.
Esta
es la razón por la cual muchos matrimonios no avanzan, ya que sus matrimonios
fueron ofrecidos a ídolos, es decir a demonios.
e) Sanidad En La Nariz
En términos Bíblicos la nariz es figura del
discernimiento que todos debemos tener de lo bueno y malo. Es la capacidad de
intuir el espíritu que opera en un lugar, momento, situación, etc. Y nos
previene de acontecimientos, o personas. Por tal definición es necesario para
una buena salud matrimonial y familiar tener totalmente habilitado el olfato
espiritual.
Es necesario tener sano el olfato espiritual para
discernir entre lo bueno y malo, santo y profano, licito e ilícito, justo e
injusto, verdadero o falso, santo e inmundo. Discernir sobre los tiempos,
edades, siglos, de Dios.
A cada padre el Señor le ha dado un grado de
discernimiento para que pueda prevenir el peligro en su matrimonio, y en sus
hijos. Y debemos ser guiados por el Espíritu Santo para las oportunas
decisiones que debemos tomar en cada momento.
A este discernimiento algunos le han llamado
intuición, y debemos prevenir y prepararnos con el poder del Espíritu, de su
Palabra, de su Sangre, de su Nombre y de la oración para ser más que vencedores
y así tener familias victoriosas.
Este discernimiento opera aun en las amistades de
nuestras parejas o hijos y debemos ser cautos cuando uno de los miembros de la
casa previene del peligro.
EL ALCOHOLISMO
Lv. 10:9-11 9 "Ni
tú ni tus hijos debéis beber vino ni sidra cuando entréis en el Tabernáculo de
reunión, para que no muráis. Estatuto perpetuo será para vuestras generaciones,
10 para poder discernir entre lo santo y lo profano,
y entre lo inmundo y lo limpio, 11 y enseñar a los hijos de Israel
todos los estatutos que Jehová les ha dado por medio de Moisés".
En este pasaje encontramos que Dios le prohibió
ingerir vino a los sacerdotes, pues el vino es enemigo del discernimiento,
recordemos que la gente que hoy está amarrada al alcohol comenzó ingiriendo
pequeñas cantidades, terminando en una dependencia abominable.
Como artífice de mentiras el diablo le ha hecho creer
a la gente que los problemas se alivian con la ingesta de cualquier licor. De
igual forma miente haciendo creer que es necesario el alcohol para mantener una
buena relación social, o cerrar un negocio. El diablo y sus emisarios mienten
cuando le hacen creer a los jóvenes que son mejores hombres o mujeres si
ingieren licor. O que van a tener la capacidad de controlarlo. Todo esto es
mentira del enemigo del hombre. Y sus consecuencias a nivel personal, familiar,
social, y económicas son desgarradoras y visibles.
Jesús dio su vida para darnos
la verdadera libertad, y poder salir del estado de esclavitud que los hombres
por su ignorancia, torpeza, y orgullo a caído; solo basta el humillarse delante
de Él, recordando que, 1Jn 3:8 El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo peca desde el
principio. Para esto apareció el Hijo de
Dios, para deshacer las obras del diablo.
DISFRUTAR LA
VIDA
Gen 2:7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del
polvo de la tierra, sopló en su nariz aliento de vida y fue el hombre un ser
viviente.
Cuando Dios sopló el aliento de vida en
Adán, inmediatamente pudo percibir por los sentidos naturales el huerto de
delicias que Dios había formado para él, pues Dios quería que disfrutara el
mundo físico que había creado; y así su existencia tuviera placeres y emociones
capaces de ser percibidas a través de los sentidos.
Eso prueba que Dios quiere que disfrutemos
su Presencia y que conozcamos sus Atributos de Gloria, pero como el hombre es
también físico, va a disfrutar de elementos físicos, y así es que Dios le da
vida biológica física al hombre.
El problema es que un hombre sin
contacto con Dios no puede disfrutar el mundo físico, ya que primero hay que
gozar de su Presencia, para que lo creado tenga sentido.
Ecl. 6:1-2 1 Hay un mal
que he visto debajo del cielo, y que es
muy común entre los hombres: 2 el del hombre a quien Dios da
riquezas, bienes y honra, y nada le falta de todo lo que su alma
desea; pero no le da Dios facultad de
disfrutar de ello, sino que lo disfrutan los extraños. Esto es vanidad y mal doloroso.
Hay gente que no disfruta su
extranjería, cuando la Biblia dice que somos extranjeros, es para aclararnos
que la tierra no es nuestro lugar de origen, sino que es el Cielo, allá está
nuestra Patria. Pero como extranjeros debemos disfrutar nuestra estancia acá. Y
Dios quiere bendecirnos durante nuestro tiempo de peregrinaje.
O sea que la vida no se disfruta por la
cantidad de bienes que se posean, sino radica en la bendición de Dios, a través
de su presencia que es la que nos permite disfrutar todas las añadiduras
temporales.
El que no tiene salud en la nariz
espiritual, no puede disfrutar la vida temporal, solo el sano la disfruta;
recuerde POR SUS HERIDAS FUISTEIS SANADOS.